Juego de
luz, sin más color que un claroscuro borroso, turbio, como desmayado. Era
imposible enfocar; mientras la intensidad de la luz latía al compás de lo que
sentía en su pecho. Su mirada navegaba entre cajones que poco a poco iban
tomando la forma de muebles, mesas, sofás, cuadros, alfombras sin definición
alguna. Late la luz, laten las pupilas, las venas, retumba el alma.
Narración en evolución..........................
Espero que puedas concluir la narración. Quiero entrever algo más de este colorido. Saludos
ResponderBorrar